Psicomotricidad relacional

Podríamos definir la psicomotricidad relacional como “un proceso que acompaña al niñ@ en su propio itinerario madurativo, que va desde la expresividad motriz y el movimiento hasta el acceso a la capacidad de descentración. En este proceso se atenderán aspectos como la afectividad, la motricidad y el conocimiento, que irán evolucionando desde la globalidad a la diferenciación, de la dependencia a la autonomía, de la impulsividad a la reflexión.

También “es una forma (tecnicidad) de llevar en un espacio determinado (la sala) y en un momento concreto (tiempo establecido), con unos objetos (materiales), una actividad dinámica basada en el cuerpo y sus acciones para llegar a procesos de pensamiento operativo.

 Esta metodología parte siempre de los siguientes aspectos:

•  El momento evolutivo/desarrollo en que  se encuentra el niñ@.

•  Las necesidades que presentan.

•  Sus deseos e intereses.

• Los organizadores del desarrollo.
•  Los parámetros psicomotores: los del yo: (tono, mirada, expresión, postura, movimiento……) y los de relación (el espacio, el tiempo, los objetos y los otros (iguales y adultos)). 

Otros aspectos que  hay que tener en cuenta son:

• Crear un ambiente acogedor y segurizante.
• Intervenir a partir de la organización de los lugares y de los materiales.
• Hacer propuestas teniendo en cuenta el juego, el movimiento, las acciones de los niñ@s.
• Garantizar el respeto a la norma (“no se puede hacer daño”).
• Utilizar el lenguaje para reforzar afectivamente.
• Favorecer el placer sensoriomotor, introduciendo pequeñas modificaciones cuando evaluemos que es necesario.
• Favorecer la autonomía en las acciones y juegos, regulando los conflictos intragrupo y trabajando la frustración de forma progresiva, a través de las propuestas que facilitan el recorrido de la sesión.
• Facilitar actividades compartidas.
• Crear un ambiente comunicativo y que fomente la expresión de los niñ@s.
• Fomentar la creatividad de los niñ@s.
• Evolucionar en los comportamientos provocadores, inhibidos, retraídos, agresivos….

La psicomotricidad relacional de carácter educativo pretende acompañar el desarrollo de la motricidad, de la afectividad, de la identidad, las relaciones sociales, la creatividad, la comunicación y el desarrollo de procesos cognitivos de los niñ@s.

Me gusta hacer con l@s niñ@s del Tipi Hibiscus psicomotricidad relacional los Viernes ya que les ayuda a descargar tensiones acumuladas durante la semana. Y qué mejor día que hoy un miércoles previo a las vacaciones de Semana Santa para hacerlo y que las comiencen renovados. Además de eso los contenidos que hoy con esta actividad lo que pretendo trabajar son:

•  El vínculo afectivo conmigo desde la confianza en sus posibilidades.

• Mejorar sus procesos de construcción de seguridad básica (aspectos básicos en el desarrollo emocional).
• La tolerancia a la frustración y la espera.
• El descubrimiento del cuerpo a través de la vivencia motriz.
• Las normas y límites que rigen la vida social.
• La comunicación (expresión y lenguajes).
• La relación con el otro y el contacto y descubrimiento de sí mismo (identidad).
• El desarrollo y disfrute del juego sensoriomotor (como paso previo a un desarrollo cognitivo más elaborado)